Un Ferrari 250 Testa Rossa de 1957, subastado en la fábrica de la casa italiana en Maranello, por el que se han pagado 9.020.000 euros (12.150.000 dólares) se ha convertido en el auto más caro en la historia del automóvil.
En una subasta llamada "Leggenda e passione" (Leyenda y pasión), organizada RMAuctions e Sotheby's, este Ferrari chasis 0714, cuarto construido de una serie de 34, ha superado el precio que se pagó el año pasado, en la anterior subasta realizada en Maranello, 7.060.000 euros (10.894.400 dólares), por otro Ferrari, un 250 GT SWB California Spyder, que durante 20 años había pertenecido al artista estadounidense James Coburn.
Los organizadores de la subasta esperaban que el Ferrari 250TR alcanzara los 12 millones de euros, pero al final fue adjudicado a una persona, que permanece en el anonimato, que ofreció por teléfono la cantidad de 9.020.000 euros (12.150.000 dólares), que tuvo que tuvo que luchar con otros tres pujadores.
El auto, cuarto de la serie de los 250TR y segundo en la versión cliente originalmente estuvo pintado de color blanco y lo compró el italiano Piero Drogo, con el que corrió los 1.000 km. de Buenos Aires de 1958 en los que se clasificó en cuarta posición junto con el venezolano Sergio González.
Al año siguiente el auto fue vendido al estadounidense Allan Connell, que los pintó de negro con una franja roja en el morro del auto, con cuyos colores fue presentado a la subasta.
Prueba de que la crisis ha llegado también a las subastas de autos clásicos, es que el Ferrari 330 P4, chasis 0838, uno de los cuatro ejemplares de este modelo que se construyeron, vencedor de los 1000 km. de Monza de 1967 con el italiano Lorenzo Bandini y el neozelandés Chris Amon, cuyo precio de partida era de 7,25 millones de euros, no ha sido adjudicado.
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