Land Rover Discovery 4

Una vez más la marca británica vuelve a aprovechar el Salón de Nueva York para presentar una nueva generación del Discovery, y van cuatro. A su mayor versatilidad, gracias a su capacidad para acoger a siete pasajeros, suma un nuevo motor diesel biturbo 3.0 TDV6 de 245 CV, y cambios en el bastidor para asegurar una mayor agilidad y dinamismo

La marca británica se sale de la tendencia de un mercado cada vez más cargado de los SUV o más conocidos como todocaminos, con un producto puramente 4x4, ya que no sólo se atreve con el asfalto sino también con intrincados recorridos reservados al todoterreno.

A nivel exterior la imagen del nuevo Discovery recibe sutiles cambios, aunque las líneas maestras de su antecesor se mantienen. Ahora el frontal cambia su aspecto tomando prestado dicho elemento de su hermano mayor, el Range Rover. Lujoso todoterreno del que también toma prestada las ópticas – tanto delanteras como traseras - que ahora incorporan tecnología LED. De manera opcional los faros pueden incorporar una función denominada “luz larga inteligente”, que permite encender y apagar las luces de carretera en función de las condiciones del tráfico.

En cuanto a su calzado se han introducido nuevas llantas de 19 pulgadas de siete radios doble y ahora, por vez primera se encuentran disponibles de manera opcional unas de 20 pulgadas y diez radios. Mientras la carrocería adquiere ahora tres nuevas tonalidades: “Nara Bonze”, “Bali Blue” e “Ipanema Sand”.

Dentro del habitáculo el salpicadero cambia ligeramente su aspecto con la introducción de nuevos cromados en la consola central y mandos giratorios de la climatización así como el cambio. Además se ha incrementado la ergonomía de cara al conductor inclinando la nueva consola y dejando más a mano la ubicación de los distintos mandos del vehículo. También se ha mejorado el acabado con la introducción de materiales más blandos en la parte superior del salpicadero, que resultan más agradables al tacto y a la vista que los plásticos duros de antaño.

También se ha cambiado la configuración del interior del habitáculo pasando de las cinco plazas a incorporar dos más, hasta alcanzar siete, con la introducción de una tercera fila de asientos. Dichos asientos son ahora de nuevo cuño tanto en la primera como en la segunda fila. Ahora se ha acentuado el perfil de las plazas delanteras para aumentar su confort y apoyo. Además se han sustituido los habituales asideros montados en el respaldo por reposacabezas de altura variable. Mientras los modelos que incorporan el acabado más completo denominado HSE, que incluye tapicería de cuero cuentan sus asientos delanteros con cojines laterales de ajuste eléctrico, para optimizar en mayor medida su apoyo lateral.
Respecto al equipamiento, el nuevo Discovery puede incorporar sistema de acceso y arranque sin llave, un nuevo sistema periférico, que consta de cinco cámaras para facilitar tanto el estacionamiento como las maniobras con remolque, además de un interfaz de sonido portátil y una radio con sistema DAB o lo que es lo mismo con tecnología digital, ya que convierte los sonidos a un formato digital.

Integrado en el cuadro de instrumentación incluye ahora una nueva pantalla de información LCD de cinco pulgadas con tecnología TFT. Mientras el mando del sistema “Terrain Response” cuenta ahora con una posición más preponderante en la parte superior de la consola central.

Texto: Bienvenido Alcántara

Destacamos: De mover el nuevo Discovery se encarga un potente biturbo turbodiesel 3.0 TDV6 dotado de 245 CV de potencia y 600 Nm de par

Bajo su capó delantero cambia su popular V6 turbodiesel de 2.7 litros de diseño Ford –PSA (Peugeot-Citroën por un 3.0 TDV6 biturbo de origen Jaguar, pues ya lo emplea en su modelo XF. Aunque basa su tecnología ha sido completamente rediseñado para adaptarse a las incrementar su prestaciones y reducir sus emisiones de gases.

Dicho mecánica cuenta con dos culatas realizadas en aluminio de cuatro válvulas por cilindros, mientras su bloque se encuentra realizado en una fundición de hierro con grafito con el objetivo de hacerlo más compacto en tamaño sin que pierda su resistencia.

Alimentado por un doble turbocompresor colocado en paralelo, uno de geometría fijo y el otro variable le permite goza de un elevado par en todo su rango de revoluciones. De hecho a bajo y medio régimen únicamente funciona el turbocompresor variable, mientras el segundo se encuentra desconectado de los flujos de admisión y escape, mientras que a partir de las 2.800 vueltas entre en funcionamiento.

También ha sido mejorado respecto al 2.7 litros el sistema de inyección de combustible por conducto común, ya que realiza hasta cinco inyecciones por ciclo –en lugar de cuatro – a una presión de 2.000 bares.

Todas este mejoras le han llevado a generar una potencia y par, 29 y 36 por ciento superior, respectivamente al de su antecesor de 2.7 litros hasta alcanzar Los 245 CV y los 600 Nm de par.

Para colmo se muestra – según se anuncia desde Land Rover – un 9 por ciento más parco tanto en consumo como emisiones hasta alcanzar una cifra de 9,4 litros/100 km de media y una emisiones de 246 gr/km de C02. Además cumple la normativa Euro V sobre emisiones de gases contaminantes que entrará en vigor en 2011.

Este motor longitudinal se encuentra asociado a un cambio automático secuencial de seis velocidades.

Respecto al bastidor, el nuevo Discovery 4 ha sufrido cambios y aunque continúa ofreciendo una carrocería monocasco autoportante ,que descansa sobre trapecios superpuestos independientes y muelles helicoidales ha visto reducir las rótulas de su suspensión (42 mm delante y 62 mm detrás) para hacer más contenidas las oscilaciones de la carrocería. Además ahora incorpora una barra estabilizada más rígida y de mayor tamaño.

También se ha revisado la cremallera de la dirección variable de la dirección incrementando su sensibilidad en los ángulos más abiertos con el objetivo de aumentar su precisión.

Por su parte el sistema de frenos de disco ventilados que incorpora el Discovery ha visto incrementar su tamaño (360 mm delante y 350 mm detrás) con el objetivo de incrementar su potencia. Como en la anterior generación se mantiene la tracción total con reductora y bloqueo manual del diferencial central. Además se sigue incluyendo de serie el sistema “Terrain Response”, con cinco programas de tracción preseleccionados. Si bien dicho sistema ha sido optimizado, al igual que el control de descenso (HDC), que ahora incorpora un control gradual de descenso en pendientes.
fuente coches.net